Si habláramos de política desde la ignorancia, si habláramos de política olvidando todos los tratados acerca de esta “ciencia” escritos hasta el momento obtendríamos resultados harto curiosos, especialmente si tenemos en cuenta que muchos de los aspectos conflictivos en esta área nacen de interpretaciones o estudios realizados por distintos estudiosos de la misma.
Iniciemos con el concepto de democracia, que generalmente entendemos como el gobierno del pueblo, por el pueblo y para el pueblo. En una democracia directa si existen 10 personas que dicen que sí es sí, aunque existan 9 personas que digan que no, en una democracia indirecta, es decir, cuando el gobierno de un Estado se ejerce a través de representantes elegidos por el pueblo a través de distintos mecanismos, si el 90% del pueblo dice que sí y el 10% del pueblo dice que no puede, realmente puede, ser no.
¿Por qué existe esta paradoja? Porque supuestamente, según los estudiosos del tema, el Gobierno de un Estado ha de impedir que se establezca una tiranía de la mayoría sobre la minoría, es decir que el Gobierno de un Estado ha de impedir que la mayoría lesione los derechos de la minoría en su beneficio lo que, dependiendo del ejemplo, podría ser acertado o desacertado. Por ejemplo ¿Es válido que el Gobierno de un Estado proteja el derecho a la propiedad de una persona aunque esta persona tenga una empresa que libera agentes contaminantes que afectan la salud de sus conciudadanos? No, no es válido, el derecho a la salud de los ciudadanos está por encima del derecho a la propiedad. ¿Es válido que un Gobierno acepte condenar a muerte a un ciudadano solo porque el 90% de la ciudadanía lo considera un asesino? No, no es válido, porque el 90% de la ciudadanía puede que no sepa todos los hechos del caso acerca del cual opinan con lo cual su opinión, en este caso, sería errada.
¿Cuándo, entonces, un Gobierno puede lesionar u obviar los derechos de un ciudadano para proteger el derecho de la mayoría? Cuando la actividad desempeñada por este ciudadano afecta el bienestar de la mayoría ¿Lógico? Sí, lo es, pero en la acción no es así.
En la realidad los derechos de la mayoría no son tenidos en cuenta por el Gobierno, muchas veces el Gobierno aprueba y promueve leyes que facilitan la tiranía de la minoría sobre la mayoría ¿Por qué digo esto? Porque las pruebas mandan.
El Gobierno suele reconocer el derecho de los empresarios, una minoría, a fijar sus precios pero no suele reconocer los derechos de una mayoría, los trabajadores, a fijar sus salarios. El Gobierno suele reconocer los derechos de una minoría, los músicos, escritores, investigadores, etc., a cobrar una suma de dinero eternamente por el fruto de su trabajo intelectual más no suele reconocer los derechos de la mayoría a cobrar un dinero por el fruto de su trabajo tanto intelectual como físico. El trabajador común tiene derecho a una jubilación o pensión siempre y cuando aporte, el músico, el artista, el investigador, aporte o no aporte cobra derechos por su labor ¿Aparece esto como justo? No, pero el Gobierno no solo lo permite, sino que lo defiende.
Detengámonos un poco ¿Por qué algo tan bello como la idea de Democracia se ha transformado, en la práctica, en algo tan sucio? La respuesta es “por los intereses particulares y de partido”.
Todos sabemos que cualquier político es una persona, como toda persona tiene ambiciones personales, estas ambiciones personales solo podrán, en este caso, conseguirse si logra que una mayoría lo vote y todo político sabe, esto es de jardín infantes, que cuando más personas con ascendencia sobre la gente lo apoye más posibilidades tiene de conseguir su voto.
Por otra parte todo político pertenece a un partido, ese partido necesita financiarse y para financiarse recurre a distintos métodos y uno de esos métodos son las donaciones realizadas por personas supuestamente “altruistas” que buscan el bien de la sociedad. Sin embargo, al aceptar las donaciones “altruistas” se genera un compromiso entre el partido y el supuesto “altruista” y ya sabemos lo que esto significa.
Como corolario, tendremos a un político que obedece no al mandato del pueblo, como debería ser, sino a las necesidades de las “personas relevantes” que le apoyan y de las “personas altruistas” que donan dinero a su partido ¿Una mierda no?
¿Y por qué un político puede desoír el deseo de quienes lo eligen y cumplir el deseo de la minoría interesada que lo apoya? Gracias a las conclusiones de los distintos estudiosos que han escrito textos de Ciencia Política, estudiosos que relativizan el bienestar del pueblo, que hablan de la tiranía de la mayoría sobre la minoría, etc., etc., etc.
Hablemos sabiéndonos idiotas ¿Qué es un político? Desde un punto de vista idiota un político es una persona cuya vocación es “servir al pueblo” ¿Qué significa, entonces, triunfar para un político? Que el pueblo sea feliz, que la mayoría del pueblo sea feliz ¿Un político está por encima o por debajo de los deseos del pueblo? Dado que un político llega al Gobierno solo si el pueblo lo elige, el político está por debajo del pueblo, por eso es el primer mandatario y no el primer mandante, el político debe obedecer el mandato de la mayoría, no tiene la opción de desobedecerlo sin incumplir este mandato, es decir, sin transformarse en un gobernante ilegítimo.
Dicho de otra forma, un Gobierno es legítimo sí y solo sí obedece y cumple el mandato de la mayoría que lo ha elegido, es ilegítimo si desobedece este mandato.
Y dado que el poder de un político emana del pueblo, nadie que esté bajo el mando de este político puede ir contra el pueblo. Ni el ejército, ni la policía, ni los jueces, ni los legisladores, nadie, absolutamente nadie, puede desoír el mandato del pueblo.
Desde este punto de vista si la mayoría de cualquier Estado opina que las sociedades que cobran los derechos de autor o las patentes medicinales o las patentes de invención están completamente desubicadas en su operar, estas sociedades han de ser desoídas y ha de ser escuchada la opinión del pueblo y estas sociedades han de adaptarse a esta opinión.
Desde este punto de vista si el pueblo opina que las entidades financieras están meando fuera del tarro el Gobierno debería tomar medidas contra estas entidades financieras y no contra el pueblo.
Desde este punto de vista si un cuerpo de policía recibe la orden de disolver una manifestación popular el cuerpo de policía debería decir que NO, que el pueblo como soberano tiene derecho a manifestarse y que ellos no son quienes para desobedecer al pueblo en su deseo.
Y así, y así, y así.
Pero además de idiotas somos ingenuos. Todos sabemos que los políticos desean llegar a una posición de poder no para servir, sino para servirse, el Presidente se ha transformado en el primer Dignatario, no en el primer Mandatario, la mujer del presidente es la primera Dama, cosa estúpida de decir en una democracia real, donde su esposo es un mero servidor de quienes lo han votado, por lo que cualquier mujer de ese país está en una posición de privilegio respecto a ella.
¿Por qué, entonces, sucede lo que sucede? Porqué los verdaderos dueños del poder no se deciden a tomar las riendas en su mano de una vez por toda y se dejan convencer por una panda de mercenarios y terminan aceptando que hay quien sabe hacer mejor las cosas, lo que no es cierto…
y si alguien piensa que eso es cierto…
que mire en su bolsillo y en el bolsillo de aquellas personas cuyo principal objetivo es trabajar para que su familia tenga la posibilidad de tener futuro.
Y si sigue pensando que es cierto… es aún más idiota que quien ha escrito esto.
Iniciemos con el concepto de democracia, que generalmente entendemos como el gobierno del pueblo, por el pueblo y para el pueblo. En una democracia directa si existen 10 personas que dicen que sí es sí, aunque existan 9 personas que digan que no, en una democracia indirecta, es decir, cuando el gobierno de un Estado se ejerce a través de representantes elegidos por el pueblo a través de distintos mecanismos, si el 90% del pueblo dice que sí y el 10% del pueblo dice que no puede, realmente puede, ser no.
¿Por qué existe esta paradoja? Porque supuestamente, según los estudiosos del tema, el Gobierno de un Estado ha de impedir que se establezca una tiranía de la mayoría sobre la minoría, es decir que el Gobierno de un Estado ha de impedir que la mayoría lesione los derechos de la minoría en su beneficio lo que, dependiendo del ejemplo, podría ser acertado o desacertado. Por ejemplo ¿Es válido que el Gobierno de un Estado proteja el derecho a la propiedad de una persona aunque esta persona tenga una empresa que libera agentes contaminantes que afectan la salud de sus conciudadanos? No, no es válido, el derecho a la salud de los ciudadanos está por encima del derecho a la propiedad. ¿Es válido que un Gobierno acepte condenar a muerte a un ciudadano solo porque el 90% de la ciudadanía lo considera un asesino? No, no es válido, porque el 90% de la ciudadanía puede que no sepa todos los hechos del caso acerca del cual opinan con lo cual su opinión, en este caso, sería errada.
¿Cuándo, entonces, un Gobierno puede lesionar u obviar los derechos de un ciudadano para proteger el derecho de la mayoría? Cuando la actividad desempeñada por este ciudadano afecta el bienestar de la mayoría ¿Lógico? Sí, lo es, pero en la acción no es así.
En la realidad los derechos de la mayoría no son tenidos en cuenta por el Gobierno, muchas veces el Gobierno aprueba y promueve leyes que facilitan la tiranía de la minoría sobre la mayoría ¿Por qué digo esto? Porque las pruebas mandan.
El Gobierno suele reconocer el derecho de los empresarios, una minoría, a fijar sus precios pero no suele reconocer los derechos de una mayoría, los trabajadores, a fijar sus salarios. El Gobierno suele reconocer los derechos de una minoría, los músicos, escritores, investigadores, etc., a cobrar una suma de dinero eternamente por el fruto de su trabajo intelectual más no suele reconocer los derechos de la mayoría a cobrar un dinero por el fruto de su trabajo tanto intelectual como físico. El trabajador común tiene derecho a una jubilación o pensión siempre y cuando aporte, el músico, el artista, el investigador, aporte o no aporte cobra derechos por su labor ¿Aparece esto como justo? No, pero el Gobierno no solo lo permite, sino que lo defiende.
Detengámonos un poco ¿Por qué algo tan bello como la idea de Democracia se ha transformado, en la práctica, en algo tan sucio? La respuesta es “por los intereses particulares y de partido”.
Todos sabemos que cualquier político es una persona, como toda persona tiene ambiciones personales, estas ambiciones personales solo podrán, en este caso, conseguirse si logra que una mayoría lo vote y todo político sabe, esto es de jardín infantes, que cuando más personas con ascendencia sobre la gente lo apoye más posibilidades tiene de conseguir su voto.
Por otra parte todo político pertenece a un partido, ese partido necesita financiarse y para financiarse recurre a distintos métodos y uno de esos métodos son las donaciones realizadas por personas supuestamente “altruistas” que buscan el bien de la sociedad. Sin embargo, al aceptar las donaciones “altruistas” se genera un compromiso entre el partido y el supuesto “altruista” y ya sabemos lo que esto significa.
Como corolario, tendremos a un político que obedece no al mandato del pueblo, como debería ser, sino a las necesidades de las “personas relevantes” que le apoyan y de las “personas altruistas” que donan dinero a su partido ¿Una mierda no?
¿Y por qué un político puede desoír el deseo de quienes lo eligen y cumplir el deseo de la minoría interesada que lo apoya? Gracias a las conclusiones de los distintos estudiosos que han escrito textos de Ciencia Política, estudiosos que relativizan el bienestar del pueblo, que hablan de la tiranía de la mayoría sobre la minoría, etc., etc., etc.
Hablemos sabiéndonos idiotas ¿Qué es un político? Desde un punto de vista idiota un político es una persona cuya vocación es “servir al pueblo” ¿Qué significa, entonces, triunfar para un político? Que el pueblo sea feliz, que la mayoría del pueblo sea feliz ¿Un político está por encima o por debajo de los deseos del pueblo? Dado que un político llega al Gobierno solo si el pueblo lo elige, el político está por debajo del pueblo, por eso es el primer mandatario y no el primer mandante, el político debe obedecer el mandato de la mayoría, no tiene la opción de desobedecerlo sin incumplir este mandato, es decir, sin transformarse en un gobernante ilegítimo.
Dicho de otra forma, un Gobierno es legítimo sí y solo sí obedece y cumple el mandato de la mayoría que lo ha elegido, es ilegítimo si desobedece este mandato.
Y dado que el poder de un político emana del pueblo, nadie que esté bajo el mando de este político puede ir contra el pueblo. Ni el ejército, ni la policía, ni los jueces, ni los legisladores, nadie, absolutamente nadie, puede desoír el mandato del pueblo.
Desde este punto de vista si la mayoría de cualquier Estado opina que las sociedades que cobran los derechos de autor o las patentes medicinales o las patentes de invención están completamente desubicadas en su operar, estas sociedades han de ser desoídas y ha de ser escuchada la opinión del pueblo y estas sociedades han de adaptarse a esta opinión.
Desde este punto de vista si el pueblo opina que las entidades financieras están meando fuera del tarro el Gobierno debería tomar medidas contra estas entidades financieras y no contra el pueblo.
Desde este punto de vista si un cuerpo de policía recibe la orden de disolver una manifestación popular el cuerpo de policía debería decir que NO, que el pueblo como soberano tiene derecho a manifestarse y que ellos no son quienes para desobedecer al pueblo en su deseo.
Y así, y así, y así.
Pero además de idiotas somos ingenuos. Todos sabemos que los políticos desean llegar a una posición de poder no para servir, sino para servirse, el Presidente se ha transformado en el primer Dignatario, no en el primer Mandatario, la mujer del presidente es la primera Dama, cosa estúpida de decir en una democracia real, donde su esposo es un mero servidor de quienes lo han votado, por lo que cualquier mujer de ese país está en una posición de privilegio respecto a ella.
¿Por qué, entonces, sucede lo que sucede? Porqué los verdaderos dueños del poder no se deciden a tomar las riendas en su mano de una vez por toda y se dejan convencer por una panda de mercenarios y terminan aceptando que hay quien sabe hacer mejor las cosas, lo que no es cierto…
y si alguien piensa que eso es cierto…
que mire en su bolsillo y en el bolsillo de aquellas personas cuyo principal objetivo es trabajar para que su familia tenga la posibilidad de tener futuro.
Y si sigue pensando que es cierto… es aún más idiota que quien ha escrito esto.
5 comentarios:
Aplausos.
Yo siempre me acuerdo de un capítulo de "Cuéntame", uno de los pocos que vi, porque no me gustaba mucho esa serie, en el que el jefe de Imanol en la inmobiliaria (Sancho), le dice que le va a dar una comisión del "cero coma cero cero uno, ¡que es muchísimo!", mientras él se forraba especulando.
Y lo pienso cuando veo que se reparten un pastel gordísimo y sale algun socialista de carton piedra de estos que gobiernan a hablar de sus medidas sociales o de sus telefonos de ayuda al fumador de tabaco negro, o cuando sus sindicalistas firman convenios que nos fusilan los derechos a cambio de un aumento de sueldo de 2 euros (no es joda eh, ese fué nuestro último convenio. Y después de la firma de esa burla, volvió a ser mayoría la misma porquería sindical oficialista).
Esto que llaman democracia es un circo inmenso. Si Sócrates levantara la cabeza y lo viese se tomaría un litro de cicuta.
Sin embargo, es increíble, pero parece que casi todo el mundo viviera con anteojeras. ¡Se creen todos burgueses!.
Yo sigo pensando que el elemento fundamental que ha dinamitado la conciencia de clase son los medios masivos de comunicación.
Usted no es idiota...
Porqué los verdaderos dueños del poder no se deciden a tomar las riendas en su mano de una vez por toda y se dejan convencer por una panda de mercenarios y terminan aceptando que hay quien sabe hacer mejor las cosas
Fíjese un poco y verá que siempre hay toda una maquinaria orientada al despiste de la gente.
No es broma.
Se trata de tener medio país enfadado por algo con el otro medio.
Izquierads contra derechas, españolistas contra independentistas, merengues contra culés, lenguas contra lenguas, ruido, ruido, ruido...
Se trata de que se hable de algo contínuamente, de lo que sea salvo de lo que a la gente le preocupa.
El debate de estos días no giraba en torno a qué hacer para enfrentarse a la crisis, el debate era por qué el gobierno no decía "crisis"...
De pena.
:[
Hmm... por qué ha eliminado las últimas entradas?
Eran buenas.
:|
Renton, hermanito ¿Cuáles son las entradas que he eliminado? Porque, puedo jurártelo, no recuerdo haber eliminado ninguna aunque, seguramente, quizás haya sido ese alemán que acostumbra ocultarme las cosas.
Un abrazo.
continuo....aplausos....chiquillo,no puedo parar de leerte.......
se que puede sonar vanidoso pero te aseguro que es verdad....sobre esto de que elpueblo estaporencimade su mandatario lohe dicho un monton de veces y ya medan por perdida.....porque pienso exactamente igual pienso que el pueblo puede promover una revolucion importante de desestabilizacion...pero claro seria un caos momentaneo y lagente esta muy comodaen su hipotecada casa con su tele a plazos de plasma y alimentandose con la tarjeta del corteingles la cualno paga haste el mes siguiente.....
ah por cierto mi plan revolucionario....era dejar de pagar los impuestos...al estado...perobuenomi esquema era bastante complicado como para explicarlo asi... a la ligera...bueno nada que volvere besitos
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